Las 20 niñas y niños creadores trabajaron en equipo arduamente durante el Taller, crearon la historia, los personajes y escenarios y le dieron vida a sus ideas a través de la animación en plastilina.
Verónica es una pequeña niña que junto con su hermano pintan las paredes de su cuarto. Cuando los papás descubren lo que han hecho, se molestan mucho con los niños. Verónica sola y triste en su cuarto, viaja a un mundo en el que los dibujos cobran vida. En el mundo blanco y negro, Verónica conoce a monstruos que después de unos cuantos pincelazos se hacen sus amigos. Sin embargo, Verónica extraña a su hermano y a sus padres, así que regresa al mundo de colores. Los dibujos de Verónica, habla de la importancia de la familia y de las distintas posibilidades en que los padres se pueden comunicar con sus hijos.